La singularidad económica

28/10/2019

Visión de la inteligencia artificial en un futuro muy próximo.

“A diferencia de los cambios anteriores en la sociedad, la revolución de la información, el tratamiento de la misma y la implementación de Inteligencia Artificial terminará teniendo un gran impacto en el empleo, haciendo que muchos de los trabajos que realizamos hoy sean en gran medida innecesarios. Para evitar una catástrofe importante, debemos planificar con anticipación esta inevitabilidad y encontrar una manera de organizar una sociedad exitosa que continúe funcionando en ausencia de trabajo tal como lo conocemos hoy.

En nuestro caso, Zonavalue Club ha invertido más de cuatro años en el desarrollo de agentes de Inteligencia Artificial con el fin de sustituir a los humanos en parte de los procesos de análisis y asset allocation en la gestión de activos, con lo que nos consideramos parte promotora de este cambio y debemos tener claro hacia dónde vamos y cómo los humanos tendrán que tomar parte en los procesos de supervisión y no tanto en la ejecución y toma de decisiones.

La información sobre todos estos cambios, y la forma de pensar formada a través del conocimiento nos ayudará a comprender con perspectiva este nuevo escenario en el que nos moveremos más pronto de lo que pensamos. La lectura nos ayudará, y en este caso, el resumen del libro de Calum Chace, escritor top de este dominio, sobre esta temática”.

Aprende lo que IA (Inteligencia Artificial) puede hacer por ti!

Durante décadas, los seres humanos han estado preocupados de que las máquinas puedan apoderarse del mundo, y estas preocupaciones no son infundadas. Hoy es completamente imaginable que se puedan desarrollar robots con todo tipo de rasgos humanos, capaces de mostrar empatía, cognición del habla y un alto nivel de inteligencia.

Si los robots son compatibles, esto podría ser muy práctico, como para las muchas personas solteras en el mundo que necesitan un compañero estable y confiable para vivir. Pero los robots también podrían decidir tomar el control y convertir a los humanos en esclavos.

Dejando a un lado la ciencia ficción, la tecnología y las máquinas hasta ahora no han causado estragos en la Tierra; por el contrario, la mecanización ha significado que los seres humanos tengan que trabajar cada vez menos, dejándolos ser creativos, productivos o simplemente perezosos. Es probable que esta tendencia continúe a medida que avanza la tecnología, así que consideremos los aspectos positivos y negativos que este aumento de la IA nos depara.

En este libro vamos a tratar 3 temas fundamentales:

  • por qué hay muchos más consultores que carpinteros hoy en día
  • cómo la tecnología está evolucionando para dominar habilidades humanas complejas
  • por qué puedes obtener un sueldo sin trabajar en un futuro cercano

La revolución industrial preparó el terreno para la revolución de la información.

Cuando las máquinas y las fábricas comenzaron a aparecer en la Inglaterra victoriana del siglo XIX, muchas personas criticaron este nuevo desarrollo. Charles Dickens, en particular, estaba preocupado por el efecto que la maquinaria tendría en los trabajadores de la clase trabajadora de Inglaterra, y plasmó estas preocupaciones en sus libros.

Incluso entonces, la gente estaba preocupada por perder sus empleos debido a las nuevas tecnologías. Pero a medida que la producción en masa asumió el control durante la Revolución Industrial, no hubo forma de detener los progresos realizados.

En realidad, no fueron las máquinas las que provocaron este cambio, sino las máquinas de vapor que estaban impulsando a estas máquinas.

La gente ya estaba familiarizada con las máquinas alimentadas por el viento y el agua, ya que éstas habían existido desde la época medieval. Lo que realmente alimentó la Revolución Industrial fue el hecho de que las nuevas máquinas a lo largo de las líneas de montaje estaban aprovechando el poder de la máquina de vapor de Thomas Newcomen.

Inventada en 1712, la máquina de vapor aceleró el inicio de la era industrial y fue mucho más poderosa que cualquiera de los artilugios accionados por agua o aire que la precedieron.

Con las máquinas asumiendo una gran parte de la mano de obra, un porcentaje significativo de la población ahora podría concentrarse en otras cosas, y fue este tiempo extra lo que conduciría a la Revolución de la Información.

Con el paso del tiempo, las máquinas se volvieron cada vez más eficientes y se necesitó menos trabajo manual en la línea de montaje. Como resultado, los trabajadores centraron su atención en la industria de servicios.

Antes de 1940, sólo la mitad del producto interno bruto (PIB) de Estados Unidos provenía de la industria de servicios, pero en 1950, esta industria estaba empleando a más de la mitad de la fuerza laboral de la nación.

Este cambio, de la industria y la agricultura al servicio, marcó el comienzo de la revolución de la información, una era que se centraría en producir conocimiento e información en lugar de materias primas.

Dado que la revolución de la información todavía está en curso, no podemos estar seguros de sus consecuencias generales; de hecho, sigue siendo difícil especular sobre cómo se verá nuestra fuerza de trabajo en el futuro.

Pero antes de mirar hacia adelante, echemos un vistazo más de cerca a cómo llegamos a donde estamos hoy.

La historia muestra que las máquinas aumentan la riqueza de las naciones y no amenazan el empleo humano.

¿Conoces el término ludismo? El ludismo fue un movimiento encabezado en el siglo XIX por artesanos ingleses que protestaron entre los años 1811 y 1816 contra las máquinas porque destruían puestos de trabajo.

¿quieres conocer los orígenes del nombre? Según cuenta la historia, en 1779, un trabajador textil con el nombre de Ned Ludd se rebeló después de ser azotado por su empleador. Para Ned, fue la gota que colmó el vaso, así que rompió su nueva máquina de tejer mecánica en señal de protesta.

La historia permaneció en la imaginación del público, y cuando los trabajadores textiles de la Inglaterra del siglo XIX enfrentaron una mayor mecanización de su profesión, se unieron en protesta por la amenaza a su sustento, llamándose a sí mismos luditas. Y al igual que la historia de Ned Ludd, los trabajadores destrozaron las nuevas máquinas de tejer en un acto de rebeldía.

¿Pero es realmente la tecnología la culpable? Cuando miramos la evidencia, podemos ver que la maquinaria generalmente aumenta la riqueza de una nación mientras el mercado laboral resiste y se adapta.

Como las máquinas no necesitan dormir y no requieren salarios o beneficios, hacen que la producción sea más barata y más rápida. Y con la fabricación de más productos, se puede satisfacer una mayor demanda, lo que resulta en más riqueza y más empleos a largo plazo.

Por lo tanto, sería una visión miope suponer que la automatización conduce sí o sí al desempleo. Después de todo, no hay una cantidad fija de trabajos que tener o trabajo que hacer.

Hasta ahora, la regla general ha sido que cuando las sociedades y las empresas innovan y se vuelven más prósperas, se crean nuevos empleos.

Hoy se utilizan más máquinas que nunca. Y al mismo tiempo, los humanos estamos trabajando más que nunca, porque las máquinas nos permiten ser más productivos y realizar tareas nuevas y emocionantes.

En 2015, la conocida consultora financiera, Deloitte, estudió las tendencias de empleo que datan de 1871 y descubrió que las máquinas realmente han generado más empleos, principalmente debido a la automatización de la industria agrícola y las profesiones relacionadas con la lavandería.

Los trabajadores de estos sectores fueron liberados repentinamente para ocupar los puestos de trabajo de la industria de servicios en expansión, incluidos maestros y enfermeras. Entre 1992 y 2014, el número de trabajos de enseñanza y enfermería en los Estados Unidos aumentó en seis y nueve por ciento, respectivamente.

Dado que las máquinas están aprendiendo a tomar decisiones cognitivas, los trabajos de la industria de servicios ahora están en riesgo.

Hasta ahora, las máquinas han hecho más bien que daño al mercado laboral, por lo que se podría pensar que mejorar las máquinas a través de la inteligencia artificial (IA) mejoraría aún más las cosas, ¿verdad? No tan rápido.

A medida que las máquinas se vuelven cada vez más inteligentes, en gran parte gracias a los desarrollos de inteligencia artificial, como el aprendizaje profundo, significa que eventualmente podrán reemplazar los mismos trabajos en el sector de servicios en los que hemos llegado a confiar. 

El aprendizaje profundo es un proceso en el que una máquina se alimenta de diferentes conjuntos de datos y utiliza algoritmos para hacer predicciones y sacar conclusiones futuras basadas en los resultados de esas predicciones. Entonces, en cierto sentido, la máquina está aprendiendo. Y cuantos más datos se le den a la máquina, más comparaciones puede hacer la máquina y más inteligente se vuelve.

Así es como las máquinas están aprendiendo a perfeccionar una gama de habilidades humanas como el reconocimiento de voz y de imagen.

En 2012, el informático y psicólogo cognitivo Geoff Hinton llevó a un equipo a la victoria en un concurso de reconocimiento de imágenes de IA. A través del aprendizaje profundo, su ordenador reconoció la mayoría de las imágenes, incluidas nubes, gatos y perros.

Este es el tipo de conocimiento que permitirá a las máquinas tomar decisiones informadas y realizar tareas humanas, lo que los convierte en trabajadores mucho más baratos y eficientes que los humanos. Y algunos trabajos en el sector de servicios ya corren el riesgo de automatizarse.

El programa de software, Quill, está automatizando algunos de los trabajos más básicos en el sector del periodismo al escribir artículos de Associated Press sobre noticias deportivas y financieras.

Desarrollado en 2010 por Narrative Science, Quill puede analizar datos y seleccionar los detalles más relevantes para un artículo. Luego puede generar rápidamente una estructura para el artículo y usar su software de generación de lenguaje para componer las oraciones necesarias.

Esto nos muestra que incluso los trabajos complejos que requieren análisis cognitivo pueden ser realizados parcial o completamente por máquinas. Y una vez que una compañía comienza a usarlos, otras compañías se verán obligadas a seguir su ejemplo o quedarán atrás de su competencia.

En un futuro cercano, las máquinas y robots inteligentes harán que muchos trabajos de servicio queden obsoletos.

Una vez que una nueva tecnología se vuelve fácilmente disponible, inevitablemente se produce un cambio rápido. Piensa en lo rápido que las personas cambiaron a cámaras digitales, o cómo las máquinas de escribir se volvieron obsoletas prácticamente de la noche a la mañana.

Con los constantes avances en IA, vamos a ver cambios más rápidos en el futuro cercano, como la proliferación de automóviles autónomos.

Una competición de renombre de coches sin conductor en Estados Unidos es el DARPA Grand Challenge, y en 2004, el ganador fue Sandstorm, un Humvee convertido que solo recorrió siete millas antes de quedarse atascado en una roca.

Pero mucho ha cambiado desde entonces: los coches autónomos que Google diseñó para Lexus y Chrysler ya han recorrido más de un millón de millas en las carreteras de California, y aún no ha habido un contratiempo significativo.

Los expertos predicen que las carreteras públicas serán tomadas por coches autónomos en el año 2041.

Esto significa que las pruebas de conducción se volverán obsoletas, al igual que la mayoría de los trabajos de conducción comercial y de chófer. Con menos accidentes en la carretera, habrá una reducción drástica de la demanda de mecánicos y casi ninguna necesidad de seguro de automóvil.

Entonces, ¿cuándo puedes esperar conseguir tu primer coche sin conductor? Chris Urmson, el jefe del proyecto de conducción automatizada de Google predice que el público en general debería tener la opción de conducir con manos libres para 2020.

Otra industria que es especialmente vulnerable a la automatización es el sector de la salud.

De hecho, el primer robot de cuidado ya se está utilizando en Japón. Tanto el robot como su empresa matriz se llaman PARO, y el robot en sí parece una pequeña foca, completa con piel y ojos grandes.

La terapia con animales se ha vuelto bastante popular recientemente, ya que los pacientes expuestos a criaturas mimosas obtienen un ánimo muy necesario para reducir el estrés y disminuir la presión arterial. Y PARO permite que más pacientes experimenten estos beneficios al llegar a aquellos que no tienen acceso a un animal real.

El autor cree que para 2041, todos tendremos acceso a dispositivos que monitorearán constantemente nuestras estadísticas vitales. Como resultado, veremos una disminución dramática en la demanda de médicos y enfermeras, ya que sus funciones básicas se automatizarán.

La tecnología conducirá a una contracción económica y puede ampliar la brecha entre las clases sociales.

Habrá una serie de desafíos que enfrentará nuestra sociedad en el futuro, uno de los cuales será el impacto económico que acompañará a un aumento en el desempleo.

Cuando un gran número de personas de repente queden desempleadas, habrá un período posterior de contracción económica que podría paralizar a la sociedad.

Cuando usemos la tecnología de IA, la productividad aumentará y los precios de los bienes y servicios disminuirán, por tanto las personas continuaran comprando.

Pero el efecto positivo inicial de estos cambios eventualmente se estabilizará y será reemplazado por una contracción económica causada por tantas personas desempleadas.

Hemos visto esto suceder en Grecia, donde el 46.5 por ciento de los jóvenes del país están desempleados.

Si bien los miembros de la familia pueden proporcionar una red de seguridad temporal para los familiares en situaciones como la de Grecia, no hay precedente para el desempleo en expansión que ocurrirá en el futuro. Atravesará todas las edades, clases y grupos demográficos, por lo que no hay una red de seguridad lo suficientemente grande como para evitar que la economía se deteriore bajo tal estrés.

Otro problema es la disparidad entre clases, lo que podría llevar a que algunas personas no puedan acceder a ciertas tecnologías y se queden atrás.

Si bien la tecnología cambia rápidamente, todavía hay un largo período antes de que los nuevos productos sean asequibles para el público en general.

Entonces, digamos que surgen implantes que permiten a las personas ricas mejorar sus cuerpos y mentes mucho más allá de lo que es posible hoy en día. Esto podría hacer que la división social sea aún peor de lo que es hoy al hacer que las vidas de los ricos sean tan drásticamente diferentes que su acceso a la tecnología los convierta en seres “superiores”.

Tendremos que trabajar juntos para superar desafíos futuros, y en el último momento veremos cómo podríamos perseverar.

La renta básica universal podría ser la solución, aunque el desempleo también tendrá consecuencias psicológicas.

¿Qué te parecería ganar dinero y no tener que trabajar? Puede sonar como un sueño, pero pronto podría ser una realidad para muchos de nosotros.

Este concepto se conoce como renta básica universal y será una necesidad en un futuro donde la mayoría de los trabajos se puedan automatizar.  

Después de todo, todavía necesitaremos un ingreso, incluso cuando la inteligencia artificial sofisticada se encarga de las tareas que mantienen los servicios en funcionamiento.

Un ingreso básico universal permite que se distribuya una cantidad fija a todos los ciudadanos, ya sea incondicionalmente o mediante lo que se conoce como un impuesto negativo sobre la renta, un método que funciona al proporcionar una cierta cantidad de dinero para ayudarlo a alcanzar una cifra fija. 

Este modelo de bienestar de ingresos básicos ya se ha probado en algunas áreas, y el mayor experimento tuvo lugar durante la década de 1970, en la ciudad canadiense de Dauphin.

El gobierno canadiense determinó que cada familia recibiría una cantidad mínima de dinero cada año, sin condiciones. Ajustados por la inflación, decidieron que este monto sería de $ 16,000 canadienses. Entonces, si el ingreso normal de una familia cae por debajo de esa cantidad, el gobierno cubriría la diferencia.

Entre 1974 y 1976, 10,000 ciudadanos se beneficiaron del programa, y ​​a pesar de las preocupaciones de que conduciría al desempleo voluntario, solo las madres con recién nacidos y adolescentes dejaron de trabajar por completo.

El ingreso básico universal debería permitir más esfuerzos artísticos, pero también podría conducir a la depresión.

Un trabajo es lo que da sentido a la vida de muchas personas, y podemos predecir con seguridad que alrededor del diez por ciento de la población sufrirá psicológicamente por estar desempleado. Se hundirán en una depresión o escaparán al mundo del entretenimiento de realidad virtual.

Pero la mayoría de la población encontrará esfuerzos saludables para alegrar sus vidas, como escribir, practicar deportes o descubrir otras actividades creativas y artísticas.

Si queremos que esto suceda, tendremos que estar preparados, con estrategias y estructuras establecidas para permitir una transición económica sin problemas y evitar algunos de los mayores peligros a los que nos vamos a enfrentar.

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